6 de mayo de 2014

Los heraldos negros


Hay golpes en la vida, tan fuertes... ¡Yo no sé!
Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos,
la resaca de todo lo sufrido
se empozara en el alma... ¡Yo no sé!

Son pocos; pero son... Abren zanjas oscuras
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán tal vez los potros de bárbaros Atilas;
o los heraldos negros que nos manda la Muerte.

Son las caídas hondas de los Cristos del alma
de alguna fe adorable que el Destino blasfema.
Esos golpes sangrientos son las crepitaciones
de algún pan que en la puerta del horno se nos quema.

Y el hombre... Pobre... ¡pobre! Vuelve los ojos, como
cuando por sobre el hombro nos llama una palmada;
vuelve los ojos locos, y todo lo vivido
se empoza, como charco de culpa, en la mirada.

Hay golpes en la vida, tan fuertes... ¡Yo no sé!

César Vallejo: Los heraldos negros



César Vallejo nació en Santiago de Chuco (Perú) el 18 de marzo de 1892, y murió en París, el 15 de abril de 1938. Está considerado un gran renovador de formas y mundos insólitos y uno de los poetas más influyentes del siglo XX. Hombre comprometido políticamente, Vallejo cultivó también la narración y el teatro.


Los heraldos negros (1918) muestran el poeta de la ternura, que supo asimilar la influencia modernista para enfrentarse con los grandes problemas del hombre, siempre desde la perspectiva de la tierra peruana.